viernes, 2 de diciembre de 2011

CUANDO EL ABSURDO NO ES ABSURDO



  
ABSURDO Proviene del latín, absurdus, y se compone del separativo ab y de surdus, sordo. Adjetivo: Contrario y opuesto a la razón. Sustantivo masculino: Disparate, inoportunidad. Dicho o hecho repugnante a la razón.
El teatro del absurdo es un teatro de revelación de la realidad concreta y viva de los elementos resistentes a la vigencia racional. Ionesco o Beckett no describen conflictos con incidencia de una anormalidad absurda.
Ellos crean un universo escénico cuya ley es el absurdo; así se revela la vigencia del absurdo de la naturaleza humana y, por lo mismo, en la sociedad de los hombres

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